martes, 29 de junio de 2010

Los inmortales



Me dijo una gaditana dedícame una letrilla
que tus canciones me agradan solo por ser
tan sencillas si tu tu, vieras ventanas
mis odiseas te las cantaria pero resulta
serranaque mira que, que viene el día
dejame que de tu sangre los mares me beba
para que la vida eterna contigo la viva
arráncate el crucifijo que en el alma lo lleva
descansate compañera y que otro dios te bendiga
dile a tu mare que a ti te visita la luna
y en tu ventana no quieres balcon ni postigos
que no te pongan coronas que tu no quieres ninguna
que yo ya te traigo una y es pa llevarte conmigo
y si llaman a tu puerta con la oscuridad cumplia
no se las tengas abiertas que seguro que es el dia
presumiendo todavia porque no lo ha dicho nadie
que a la orilla de los mares la nave de la alegria
en tu playa que es la mia el amor en carnavales
desenterrando puñales de las arenas salian y con su sangre escribia
los inmortales, los inmortaleeessss... los inmortaaaaalessss
los inmortaaaaaleeeesss...






Yo me enamoré de ti.
por culpa de los carnavales,
desde entonces no se si vivir
o morirme a raudales.
Pero ya me enamoré
y como con los corazones,
nunca gana razones,
mis razones las voy a perder.
Ya se cual es tu ventana,
por si se abre algún día,
la luz de cada mañana
se meta en tu cama y te de la alegría,
y con las manos vacías,
abras la que yo sabía que fue tu ventana.
Y si pa mí gaditano
algún diíta la abres,
que sepas que yo tu mano
no se la pido a tu padre.
Tu padre tiene la suya,
así que puestos a pedir,
si yo pidiera la tuya
como es tu mano y es tuya,
te la pediría a ti.
Te estoy pidiendo la mano,
dámela por carnavales,
o me chivo a tu padre
y le digo que te amo.
Y que pa colmo de males
salgo en carnavales
y soy gaditano.





Hoy me quiero emborrachar,
con la mitad de mis amigos,
y acordarme de la otra mitad,
porque también han sido,
mis amigos de verdad,
y aunque al final se me hayan ido,
no por ello me olvido,
aun sabido que no volverán.

Uno se fue por dinero,
otro se fue por envidia,
otro se fue porque una mujer se llevo su corazón entero,
uno se fue de mi vida
y otros perdieron su vida cuando se me fueron.

Y los que están a mi lao,
son los que nunca se han ido,
por eso me emborrachao,
con estos amigos míos.

El loco de la guitarra,
el que to la inspiración,
se la encontraba en la barra
mira si será macarra,
que una vez se emborrachó.

Con gente de otra comparsa,
y les dijo tan sincero:
Estas cosas que pasan,
son las cosas que no quiero,
tenemos que estar unidos,
sino como amigos,
como compañeros.




Si una cruz no aguanto yo,
es porque en ella fue clavado,
el único que en nombre de Dios,
se enfrentara al Estado.

Y cual si fuera un ladrón,
mataron a ese Nazareno,
entre el malo y el bueno,
porque se parecía a los dos.

Y los que resucitaron,
fueron cien mil gobernantes,
que transformaron las cruces
del Monte Calvario
en su cruz de diamantes,
como una espada gigante,
por las que río de sangre del pueblo brotaron.

Por eso cuando la miro.
el corazón se me esconde,
no porque sea un vampiro,
sino porque he sido un hombre.

Y he visto tanta miseria,
y tan poquita virtud,
que renegué de su vera,
por los siglos de los siglos
donde estuviera esa cruz.

La cruz que los dos llevamos,
como infierno y pesadilla,
y un hincar de rodillas,
hasta el día en que muramos.
Por eso si muero un día
que rompan la mía contra el Vaticano.

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